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Amplia vigencia de la institución familiar en Europa y aceptación de nuevas formas de convivencia

La Fundación BBVA presenta los resultados de la segunda parte del Estudio Values and Worldviews, que examina un amplio conjunto de percepciones, actitudes y valores centrales de los ciudadanos de 10 países europeos. El estudio se ha estructurado en dos partes: visiones y valores referidos a la esfera pública (política, economía), hecho público en el mes de abril, y a la esfera privada (familia, religión, ética, trabajo).

13 junio, 2013

Se han entrevistado a 15.000 personas de 18 y más años en 10 países de la Unión Europea: Alemania, Dinamarca, España, Francia, Italia, Países Bajos, Polonia, Reino Unido, República Checa, Suecia. El trabajo de campo ha estado a cargo de Ipsos, finalizando en enero de 2013. El diseño y análisis del estudio ha sido responsabilidad del Departamento de Estudios Sociales y Opinión Pública de la Fundación BBVA.

En este módulo se examina los valores vinculados con la esfera privada, incluyendo aspectos fundamentales de la vida personal, como la visión sobre la familia, el trabajo, los estilos de vida, las creencias y la religiosidad.

Entre los principales resultados del estudio, cabe destacar los siguientes:

Satisfacción y valores personales

El nivel de satisfacción de los ciudadanos europeos con su vida personal es alto (media de 6,9 en una escala de 0 a 10). Satisfacción que se observa en todos los segmentos sociodemográficos y en todos los países estudiados.

La familia y la salud son lo más importante para los ciudadanos tanto en España como en los demás países europeos, con valores medios de 9 puntos en una escala de importancia de 0 a 10. Le siguen con puntuaciones superiores a los 8 puntos, los ingresos del hogar, la relación de pareja y los amigos. El tiempo libre y el trabajo obtienen también puntuaciones elevadas, mientras que la participación en la vida política o la religión se sitúan por debajo de los cinco puntos de media. Los españoles destacan por adjudicarle una mayor importancia al trabajo (8,3 frente a 7,5 del promedio europeo) y menor importancia a la religión y a la participación en la vida política.

Estilos de vida e Internet en la vida personal

Uno de cada tres europeos declara practicar algún deporte, de forma habitual, mientras que casi uno de cada cuatro realiza algún trabajo voluntario. Sin embargo, la realización de actividades de tipo artístico es poco frecuente.

La asistencia a eventos culturales y recreativos es media-baja y muy desigual en Europa.

Entre los usuarios de la red, la mayoría se siente identificada o se siente parte del mundo de Internet (media de 6,6 en una escala de identificación de 0 a 10, donde 0 significa que no se siente en absoluto identificado y 10 que se siente muy identificado).

Creencias, religiosidad y principios éticos

Diferencias en la pertenencia religiosa en Europa y pauta de bajo nivel de religiosidad en general. Aunque en los 10 países estudiados, la mayoría, en menor o mayor grado, pertenece a una religión (el 66% en el promedio europeo y el 71% en España), el nivel de religiosidad declarado, salvo en Italia y Polonia, es bajo.

Los ritos religiosos tienen hoy una significación más social que estrictamente religiosa, pero los europeos expresan la preferencia por mantenerlos

Los europeos no profesan un relativismo ético, pero se muestran divididos sobre la flexibilidad en la aplicación de los principios éticos.

Visión sobre la familia y aceptabilidad de prácticas objeto de controversia moral

El matrimonio no ha perdido su vigencia como institución. Si bien la mayoría de los europeos cree que es mejor convivir juntos antes de casarse (media de acuerdo de 6,4 en una escala de 0 a 10 en el conjunto europeo), rechazan la idea de que “el matrimonio sea una institución pasada de moda” (media de acuerdo de tan solo un 3,8).

Prácticas como el vivir en pareja sin casarse, el divorcio o ser madre o padre soltero, son hoy ampliamente aceptadas por los europeos. En todos los países, la amplia mayoría considera aceptable estas conductas.

El matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción y concepción de un niño por parte de dichas parejas suscita división y desaprobación en muchos países europeos.

Mientras que la mayoría considera aceptable la eutanasia en situaciones extremas, el aborto divide a los europeos.