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El catedrático de Harvard Michael Jensen reivindica la integridad como factor de producción en el Economics for Management Lecture Series IESE-Fundación BBVA Prize

El economista americano Michael C. Jensen ha sido galardonado con el Economics for Management Lecture Series IESE-Fundación BBVA Prize, un galardón que tiene como objetivo reconocer y apoyar la labor investigadora de un experto internacional y de reconocido prestigio en el área de Economía, cuya contribución al ámbito empresarial haya sido especialmente relevante. Con este motivo, el galardonado ha impartido una conferencia en España que posteriormente será publicada por Cambridge University Press dentro de una línea editorial creada al efecto: Economics for Management Lecture Series.

18 mayo, 2011

Michael C. Jensen, de 71 años, es Jesse Isidor Straus Professor of Business Administration en la Harvard Business School y presidente de Social Science Electronic Publishing. Es autor de más de un centenar de estudios científicos y de numerosos artículos en prensa general sobre actualidad en economía, finanzas y empresas. Su trabajo Theory of the Firm: Managerial Behavior, Agency Costs, and Ownership Structure es uno de los más citados en Economía en los últimos treinta años y ha obtenido el título de “Citation Classic” del Institute for Scientific Information.

La integridad como modelo de gestión

Con motivo de la entrega del premio, Michael Jensen impartió la conferencia Más allá de la teoría de la agencia: el oculto, y hasta ahora inaccesible, poder de la integridad. En ella presentó un modelo que reconoce en la integridad un factor de producción tan importante para las empresas como la tecnología o el conocimiento.

La integridad, para Jensen, no es un concepto ético o moral, sino un hecho: un objeto es íntegro cuando cuenta con todos sus componentes y están dispuestos de manera que cumplan el fin para el que fue diseñado. Y pone el ejemplo de la rueda: “En la medida en que nos quiten los radios de la rueda de la bicicleta, la rueda ya no será entera y completa, y eso afectará a su funcionalidad (capacidad de trabajo) y, en consecuencia, a su rendimiento”. Esto se aplica a objetos, al cuerpo humano o sistemas, como las empresas. Jensen postula que existe una ley ontológica de la integridad: “En la medida que la integridad disminuye, la oportunidad para el rendimiento (el conjunto de oportunidades) disminuye”.

En el caso de las personas y de las empresas, la integridad “es una cuestión de palabra”. La integridad es cumplir la propia palabra y a tiempo; y, cuando no es posible mantenerla, informar a las partes afectadas y explicarles qué se va a hacer para afrontar el impacto que esto produce. Cuando procedemos así, cumplimos nuestra palabra a pesar de no haber podido mantenerla y así conservamos la integridad”.

Jensen puso el ejemplo de la crisis del analgésico Tylenol en septiembre de 1982, cuando, en Chicago, un desaprensivo se dedicó a acudir a puntos de venta, abrir los recipientes, impregnar el producto con cianuro y volverlos a dejar en la estantería. Cuando se tuvo noticia de este hecho a raíz de la muerte de siete personas, Johnson & Johnson retiró de inmediato los 31 millones de envases de Tylenol distribuidos por todo el país. De esta manera fue capaz de mantener su integridad y la confianza de sus clientes”, afirma Jensen. En efecto, sólo dos meses más tarde el producto había vuelto a la venta en un envase con un sistema de precinto reforzado que a partir de entonces se convirtió en estándar para la FDA y sólo un año más tarde había vuelto a ser el analgésico líder del mercado.

El comportamiento falto de integridad ha afectado gravemente a la credibilidad del sector financiero. “Si examinamos la crisis de las hipotecas sub-prime, cada uno de los elementos del sistema comenzó a comportarse de un modo que le dejó fuera-de-integridad: el sistema acabó premiando la constitución y venta de hipotecas y de títulos respaldados por hipotecas, pero no de hipotecas y títulos respaldados que iban a ser pagados. Es obvio que un sistema así carecía de integridad y estamos pagando un precio muy alto”, apunta Jensen.