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ESENCIALES Nº 42: EXPORTACIONES EN ESPAÑA Y SUS COMUNIDADES AUTÓNOMAS

El porcentaje de empresas exportadoras se duplica desde 2009, pero solo cinco firmas concentran casi el 10% de las ventas españolas de bienes al exterior

Las exportaciones de bienes han tenido un destacado protagonismo en la salida de la recesión de la economía española: su peso en el PIB ha aumentado 8,8 puntos porcentuales desde 2009, hasta situarse en el 23,6% en 2018. Ello ha sido posible gracias a que casi se ha duplicado el porcentaje de empresas exportadoras (del 3,2% sobre el total de empresas en 2009 al 6,1% en 2018). Sin embargo, es muy reducido el porcentaje de empresas que exportan con regularidad y las exportaciones están muy concentradas en pocas compañías. Solo cinco firmas generan el 9,9% del total de las exportaciones españolas y las 500 más grandes acumulan el 58%. Las diferencias en la propensión a exportar de las regiones españolas son muy grandes, con un peso de las exportaciones en el PIB que oscila entre el valor máximo del 44,5% en Navarra al mínimo del 6,1% en Baleares. País Vasco y Madrid son las comunidades autónomas con el mayor porcentaje de empresas exportadoras (por encima del 10%), mientras que en otras regiones (Baleares, Canarias, Asturias y Castilla y León) solo 5 empresas concentran más de la mitad de sus ventas al exterior. Dada la elevada deuda externa neta de la economía española, es necesario seguir avanzando en el grado de internacionalización de las empresas, incorporando una mayor base de empresas que exporten con regularidad.

23 diciembre, 2019

La crisis financiera internacional que comenzó en 2007 y que afectó con virulencia a España (alcanzó su máxima intensidad en 2009, con una caída del PIB del 3,6%) obligó a las empresas a buscar en el exterior la pérdida de demanda del mercado nacional. De hecho, si en 2009 el peso de las exportaciones de bienes y servicios en el PIB de España se situó en un valor mínimo del 23,1%, desde entonces ha ido creciendo hasta situarse en el 35,1% en 2018. No obstante, ese valor se sitúa 11,2 puntos porcentuales (pp.) por debajo de la media de la UE-28. Del total de exportaciones, el 69% son bienes mientras que el 31% restante son servicios.

La información por comunidades autónomas muestra que en todas ellas ha aumentado el peso de las exportaciones de bienes sobre el PIB desde 2009, aunque la intensidad del crecimiento presenta un amplio rango de variación, que va de un mínimo de 1,6 pp. en Baleares a un máximo de 18,8 pp. en Murcia. La situación a finales de 2018 también muestra importantes diferencias en la ratio exportaciones/PIB, con porcentajes por encima del 30% en Cataluña (31%), Aragón (33,6%), Murcia (34,5%), País Vasco (34,8%), Galicia (35,3%) y Navarra (44,5%). Baleares y Canarias son con diferencia las regiones españolas donde menos pesan las exportaciones de bienes en el PIB (6,1% y 6,3%, respectivamente).

El aumento que se ha producido en el peso de las exportaciones de bienes en el PIB desde 2009 contrasta por completo con la caída que tuvo lugar en los años anteriores, caracterizados, hasta 2007, por el elevado ritmo de crecimiento económico. Así, desde el año 2000 hasta 2009, el peso de las exportaciones de bienes en el PIB cayó 4,4 pp. en España hasta alcanzar un mínimo del 14,8%. La caída tuvo lugar en casi todas las CC. AA., excepto Canarias y Extremadura, y llegó a descender 13 pp. en Navarra. Pero el aumento posterior ha sido tan intenso, que en todas las regiones, sin excepción, el peso de las exportaciones en el PIB en 2018 supera al que tenía a principio de siglo.

El aumento del peso de las exportaciones en el PIB se ha producido en parte porque más empresas han buscado en terceros países la forma de compensar la pérdida de negocio en el mercado doméstico. Desde 2009, el porcentaje de empresas exportadoras no ha dejado de crecer, hasta situarse en 2018 en un nivel máximo del 6,1%, que duplica el valor del 3,2% de 2009. En la actualidad hay 203.990 empresas exportadoras en España, cifra que multiplica por 1,9 las que había en 2009.

También en términos del porcentaje de empresas exportadoras existen acusadas diferencias entre CC. AA., con un rango de variación de 13,3 pp. entre el valor mínimo del 3,0% de Asturias y el máximo del 16,4% de Madrid. Junto con Madrid, destaca el País Vasco con un porcentaje por encima del 10%. En el extremo opuesto, por debajo del 4%, se sitúan, además de Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Extremadura y Galicia. En todas las regiones ha aumentado el porcentaje de empresas exportadoras, especialmente en Madrid y el País Vasco.

También ha aumentado el porcentaje de empresas que exportan de forma regular (al menos cuatro años seguidos), ya que ha pasado del 1,2% en 2009 al 1,6% en 2018. Eso implica que, en 2018, 51.768 compañías españolas exportan con regularidad. Por regiones, de nuevo en todas las CC. AA. ha aumentado el porcentaje de las empresas que exportan con regularidad, destacando el crecimiento que ha tenido lugar en el País Vasco (1,9 pp.). Es precisamente esta comunidad la que tiene una mayor propensión de sus empresas a exportar con regularidad (el 3,5% del total), seguida de La Rioja y Cataluña (ambas con el 2,8%). Nuevamente, son Baleares (0,6%) y Canarias (0,7%) las regiones menos propensas a exportar con regularidad.

Una debilidad de las exportaciones españolas de bienes es que un reducido número de empresas concentra una parte muy grande de las exportaciones, de forma que existe un amplio colectivo de empresas que exportan poco y de forma irregular. Es una debilidad al menos por dos motivos: a) porque la gran concentración implica que el sector exportador es más vulnerable a los problemas que puedan afectar a esas pocas grandes empresas que exportan; y b) porque si hubiera una mayor base de empresas que exportan con regularidad, eso tendría beneficios macroeconómicos teniendo en cuenta que son ese tipo de empresas las que suelen caracterizarse por su mayor productividad/competitividad. Con datos de 2018, de las 203.990 empresas exportadoras, el 0,2% (500 empresas) concentran el 58% del total de exportaciones de bienes de España, por lo que el 99,8% de empresas restantes tienen un volumen de ventas al exterior muy reducido. Solo 5 empresas generan el 9,9% de las exportaciones españolas. Es una proporción que se mantiene estable desde hace años, lo que muestra las dificultades para que más empresas se internacionalicen y ganen tamaño en los mercados exteriores.

Por CC. AA., en ocho de ellas las 10 empresas que más exportan concentran más del 50% de las ventas fuera de España, un porcentaje que llega a superar el 60% en el caso de Asturias, Canarias y Baleares. En cambio, la concentración es inferior al 20% en Cataluña que es la región con una estructura de sus exportaciones más diversificada por empresas. En Asturias, Baleares, Canarias y Castilla y León solo 5 empresas exportan más de la mitad del total de exportaciones de la región.

En resumen, las exportaciones han jugado un papel clave en la recuperación reciente de la economía española gracias a que cada vez son más las empresas que ponen su punto de mira en los mercados internacionales en un mundo cada vez más globalizado. Sin embargo, el porcentaje de empresas que exporta con regularidad es reducido,  a lo que no es ajeno el hecho de que el tejido empresarial está dominado por compañías de pequeño tamaño. Las acusadas diferencias entre regiones en su propensión a exportar vienen explicadas en parte por su especialización (peso de la industria vs. servicios), pero también por su competitividad y por la dimensión de sus empresas. La política regional tiene margen de maniobra para incentivar la internacionalización de las empresas, de forma que haya más que comiencen a exportar, lo que contribuiría a reducir la elevada concentración de las exportaciones en un muy reducido número de grandes empresas. La reducción de las posibles barreras al crecimiento empresarial (legales, fiscales, burocráticas, etc.) son necesarias para aumentar la propensión a exportar, dada la clara conexión entre el tamaño empresarial y la internacionalización.

Para ampliar esta información puede consultarse el informe: Crecimiento y competitividad: los desafíos de un desarrollo inteligente (Fundación BBVA, 2014).