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Aumentar el empleo e incentivar la prolongación de la vida laboral, claves ante los retos del envejecimiento

Tommy Bengtsson, catedrático del Departamento de Historia Económica de la Universidad de Lund (Suecia), ha analizado en la Fundación BBVA los retos que el envejecimiento plantea a la sostenibilidad de las prestaciones sociales en Europa. En la conferencia impartida dentro del ciclo Demography Today ha analizado tanto la situación en Suecia como en España.

22 marzo, 2018

Perfil

Tommy Bengtsson

Ciclo de conferencias

“Demography Today”

Bengtsson ha abordado separadamente las distintas soluciones que se plantean a un escenario común a prácticamente todos los países europeos: el envejecimiento de la población y la caída de la natalidad amenazan elementos básicos del Estado del Bienestar, en particular las pensiones y el sistema sanitario público.

¿Habría que apostar por políticas que promuevan la natalidad? Bengtsson considera que “podrían ser una solución para el futuro. España tendrá una proporción muy alta de mayores a partir de las décadas de 2040-2050. Para entonces, los niños nacidos hoy se habrán incorporado al mundo laboral, así que pueden generar recursos para los mayores. Pero hay que tener en cuenta que durante los 25-30 años que tardarán en llegar al mercado de trabajo la situación se pondrá un poco peor desde el punto de vista de los recursos: habrá padres que tengan que quedarse en casa para cuidar de los hijos y habrá que financiar las guarderías y la educación de esos niños”.

Algunas voces han abogado por fomentar la inmigración para compensar los efectos del envejecimiento poblacional. Bengtsson afirma que la evidencia científica disponible respalda esta medida “sobre todo respecto a la emigración dentro de Europa. Por ejemplo, la emigración desde Europa del Este a Reino Unido está aumentando la riqueza de este último país. Y lo mismo se puede decir de Suecia y otros países. En general, los emigrantes de otros Estados europeos encuentran trabajo con bastante facilidad. De hecho, vienen en busca de trabajo y llegan con un buen nivel de formación, así que en este caso hay una contribución neta. En cambio la emigración desde fuera de Europa no creo que esté ayudando a combatir los problemas derivados del envejecimiento”. En un artículo publicado en ‘Population and Development Review’ en 2011, Bengtsson aludía a la experiencia sueca durante varias décadas, que muestra una alta tasa de paro entre este tipo de inmigración que, además, adopta muy rápidamente los índices de fecundidad de la población nativa, llegando incluso a tener menos hijos, lo que contrarresta su posible aportación al relevo generacional.

Otra de las medidas presentes en el debate público es aumentar la base de horas trabajadas, lo que redundaría en mayores ingresos a través del impuesto sobre la renta. El catedrático de la Universidad de Lund no considera que esta sea una opción realista en Suecia, pero sí en España. “El desempleo joven en España es muy elevado; y también lo es entre las personas a partir de 50 años. En España, la primera vía para compensar los costes del envejecimiento es lograr que más gente encuentre trabajo”. Para esto, advierte el especialista, “es importante proporcionar incentivos contra el abandono escolar”, pues la tasa en España es muy elevada en comparación con Suecia y la falta de formación comporta un lastre para la empleabilidad de los jóvenes.

Y otra iniciativa que Bengtsson estima esencial: estimular la continuidad en el mercado laboral más allá de la edad legal de jubilación. “Es importante proporcionar incentivos. En España la cuantía de la jubilación es fija en función del salario percibido. En Suecia teníamos un sistema similar, pero lo cambiamos en los años noventa. Ahora, si trabajas un año más, tu pensión aumenta un 5%; si trabajas dos años adicionales, un 10%”.

“Si España pone el foco en combatir el desempleo y en proporcionar incentivos para retrasar la jubilación no creo que sea necesario subir impuestos para financiar el sistema de pensiones ni recortar las pensiones más altas”, concluye el catedrático de la Universidad de Lund.